Siete de cada diez alumnos cursarán sus estudios en euskera a partir de la próxima semana.
Según los últimos datos facilitados por el Departamento de Educación, las familias vascas han elegido mayoritariamente que sus hijos e hijas estudien en el modelo D, lo que consolida el consenso ligüístico existente en el ámbito educativo.
Siete de cada diez alumnos comenzarán las clases este curso escolar en euskera, incluyendo Bachillerato y Formación Profesional, porcentaje que se eleva hasta el 82% en los ciclos inferiores en los que se matriculan los más pequeños.
En Educación Infantil, cuya franja de edad comprende desde los 3 hasta los 5 años, este modelo es el más demandado y sus estadísticas suben hasta 0,5 puntos, con el 82,4% de su alumnado en el modelo D. Respectivamente le sigue el modelo B con un 15,1% del alumnado matriculado y, posteriormente, el modelo A con el 2,4% de las familias.
En relación a la red que las familias eligen para la escolarización de sus hijos e hijas, red pública o red concertada-privada, esta elección se mantiene en proporciones similares a las del curso pasado, siendo la pública la elegida por algo más de la mitad, el 51,1%, mientras que el 48,9% restante lo hace por la privada-concertada.
Caída en las matriculaciones
El curso arrancará en Euskadi con una considerada caída de estudiantes motivada por la crisis demográfica, un 0,9% respecto al año pasado, lo que supone 3.281 estudiantes menos, principalmente de Infantil y Primaria.
Por territorios históricos Bizkaia se sitúa por encima de la media vasca con una caída de un 1,2%, triple en comparación con Álava (0,46%) y del doble que Guipúzcoa (0,67%) que supone el 66,6% de las matrículas que han perdido los colegios de la comunidad.
No obstante, esta disminución lejos está de los 5.200 estudiantes menos del curso pasado concidicionado por el COVID y las restricciones que provocó un retraso en el inicio de la escolarización de los más pequeños.